Es el Sudeste Asiático donde he podido ver las mejores puestas de sol, los reflejos en el agua de las grandes llanuras de arrozales y las estilizadas palmeras se extienden por todo el territorio. Un espacio en el mundo con una cultura muy diferente a la mía pero que irradia belleza y delicadeza por todos lados. Mirando esta ilustración mi mente experimenta una sensación de paz al instante recordando un atardecer de color rosa peonía que nunca olvidaré, ojalá pudiera viajar allí más a menudo…